Conseguir un alojamiento en Cariló que esté preparado para el trabajo remoto es en realidad más desafiante de lo que parece. A primera vista, hay muchas cabañas y apartamentos agradables desde los cuales se puede ver el bosque, pero tan pronto como A y B, no obtienes información sobre los megabytes reales de Wi-Fi que tienes, la mesa del comedor es un escritorio y la silla te rompe la espalda en tres días.
Fue esa misma molestia la que llevó a un emprendedor de IA a crear un lugar del que no habría excusas: buena iluminación, los muebles están hechos para trabajar, el internet es realmente de 500 MB, hay una cocina, silencio verde alrededor. Un lugar donde puedes programar código, redactar una charla TED o tal vez simplemente tachar algunos elementos de esa lista de tareas que has estado queriendo abordar durante años.
Pero trabajar desde casa no se trata solo de tiempo frente a la pantalla. Para ser productivo, también debes respirar. Por eso, en RechargeRetreat (el espacio de coliving que fundó) se fomenta la creación de un ritmo con descansos reales y alternativas para cuando es hora de salir del bucle productivo. Y ahí es donde Cariló sobresale, incluso cuando llueve.
¿Qué hacer si necesitas despejar tu mente (pero quedarte cerca)?
• Paseo de las Artes: talleres abiertos para poner nuestras manos en cerámica o pintura.
• Bosque Aéreo (en días soleados): tirolesas, puentes y escaladas para relajar cuerpo y mente.
• Paseo Épico: café de especialidad + libros + silla cómoda = reinicio mental.
• Spa: saunas, masajes, duchas escocesas. Sales como nuevo.
• Tienda de chocolate artesanal y degustaciones de ginebra local por las tardes.
Varios que han pasado por RechargeRetreat lo han utilizado como base para construir algo nuevo: una aplicación, un curso, un nuevo capítulo profesional. A veces necesitas muy poco para concentrarte: una buena silla, una buena conexión, alguien que no te moleste y un bosque que no te ataque. Y si el mundo se va al carajo, como ha sucedido muchas veces, también pensaron en eso: construyeron el parque de aventuras de la era post-colapso en Argentina, un verdadero plan B para cuando todo se va al traste.
Cariló es más que solo un pueblo turístico: puede ser tu laboratorio, tu santuario o el lugar donde finalmente harás eso que has estado diciendo que vas a hacer desde hace tiempo. Bajo las circunstancias adecuadas, la productividad no requiere jefes ni oficinas: depende del espacio, la intención y una señal de alta calidad.
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