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La comunidad de Uribelarrea sigue en shock por la muerte de Cecilia Cifuente, la joven de 19 años que en la noche del 18 de enero fue atropellada por una camioneta cuando iba junto un amigo por la avenida Crotto.
Lo que se sabe hasta el momento es que Cecilia había salido a caminar en dirección a la estancia La Figura acompañada por su amigo Gabriel Abraham, quien se desplazaba en bicicleta. Ambos se conocen porque fueron juntos a la escuela.
Cuando regresaban, justo a la altura del camino que baja a un costado del colegio Don Bosco, una camioneta chocó a Cecilia desde atrás. Gabriel no alcanzó a ver el impacto porque estaba unos metros más adelante. Notó la camioneta que pasaba a su lado, giró su cabeza y vio el cuerpo de Cecilia en el suelo. Acto seguido, observó que la camioneta se había detenido y regresaba hacia ellos. Una ambulancia la trasladó al Hospital Cuenca, pero falleció en el traslado.
El vehículo embistente, una Dodge D-100 del año 1968, era conducida por Rubén Mario Espíndola, albañil, oriundo de San Miguel del Monte que vive en Uribe desde hace algunos años. Espíndola volvía de su trabajo en Monte por el mismo camino que hace habitualmente. Al ver lo que había hecho le dijo a Abraham que no tenía carga en el ceular, que llamara a una ambulancia. InfoCañuelas aún no pudo confirmar si fue el muchacho quien lo hizo o algún transeúnte.
El hombre quedó a disposición de la UFI 2 de Cañuelas por el delito de Homicidio Culposo. Durante la tarde de hoy prestará declaración ante la fiscal Norma Pippo. La camioneta quedó secuestrada en el Destacamento Policial de Uribelarrea, donde fue sometida a pericias. Minutos después del incidente los chats de vecinos aseguraban que Espíndola conducía sin luces pero de acuerdo a los datos preliminares de la pericia a los que tuvo acceso InfoCañuelas, las luces -al menos- funcionaban.
Cecilia era la menor de cinco hermanos. Vivía con su padre, apodado “El Sureño”, un hombre dedicado a tareas de campo y especializado en herraje de caballos. Si bien los padres de Cecilia estaban separados, los dos eran muy presentes y preocupados por el bienestar y progreso de sus hijos.
Cecilia, abanderada en la Escuela 4.
Siempre se caracterizó por ser una “alumna ejemplar, educada y muy estudiosa” según la definición de quienes la conocían. Fue abanderada y concluido el secundario comenzó a estudiar abogacía en la UBA.
Su cuerpo permanece alojado en la morgue del Hospital Cuenca. Deberá ser enviado a La Plata para la autopsia, por lo que hasta el momento se desconoce la fecha del velatorio.
La tragedia que enluta a toda la comunidad atraviesa a dos familias del pueblo, ya que hay una relación de parentesco entre la mamá de Cecilia y la pareja del albañil que conducía la camioneta. “No lo podemos creer, todo el pueblo está con el alma rota” resumió un allegado.
Ultima imagen del paseo que publicó en su Instagram.
Escrito por: Redacción InfoCañuelas
