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En la noche del lunes, Cañuelas se jugada el partido más importante del año, el de seguir con posibilidades netas de ascender de categoría. Estaba obligado a ganar para forzar un tercer partido, ya que, en la primera semifinal la UAI se había impuesto por 57 a 49.
El escenario era el ideal. Las gradas del microestadio Arín se veían colmadas, y la gente que se acercó hasta la sede de Lara y 25 de Mayo sabe bien que el rojo es un equipo “guapo” y conoce de hazañas. La fe intacta.
El partido comenzó como se especulaba. El rojo salió decidido a imponer su juego, pero sin descuidar el terreno defensivo. Por su parte Urquiza no especuló y cada ataque que generaba lo intercambiaba por puntos.
Así, ambos equipos protagonizaron un primer tiempo punto a punto, infartante, que al cabo de transcurridos los iniciales veinte minutos el tanteador arrojó un transitorio empate en 26 unidades.
Las chances de revertir la situación y forzar un tercer juego quedaban intactas.
En el complemento, el visitante se decidió a liquidar el pleito. La UAI Urquiza se aprovechó de un Cañuelas desconocido y desorientado, y rápidamente consiguió una importante ventaja. Abajo por once, el rojo caía 35 a 46.
En los últimos diez minutos finales, el equipo de Dionel Sánchez no pudo revertir la situación. La UAI siguió su marcha efectiva y se alzó con la victoria por 68 a 46. Victoria que lo deposita directamente en la Primera B.
Pese a la derrota, que dejó truncado el sueño del ascenso, el año del equipo rojo fue más que positivo. Vale mencionar que, la actual temporada fue la primera del conjunto de Sánchez en la divisional C.
No obstante a esto, Cañuelas no pasó desapercibido, animó el torneo y se metió entre los cuatro mejores del certamen. El ascenso, muy cerca. A pensar en el 2014.
INFOCAÑUELAS
Escrito por: Redacción InfoCañuelas
