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El triunfo contundente de Marisa Fassi es el primer dato que arroja el balance electoral de las elecciones primarias. Si se toma ese resultado en forma aislada se podría hablar de una elección modesta (la respaldó el 40 % del electorado local) pero considerando el turbulento contexto nacional se puede decir que hizo una excelente elección potenciando sus chances de ser reelegida en octubre.
Este buen desempeño de Fassi se apoya en los aspectos positivos de su gestión, sobre todo la obra pública; en su aceitada maquinaria electoral con dominio sobre todo el territorio; y una oposición dividida que nunca logra hacer pie ante un oficialismo abroquelado.
El corte de boletas fue un factor que tuvo cierta incidencia. Con el 92 % de urnas escrutadas Marisa Fassi obtuvo 12.376 votos, 500 más que los 11.854 de Kicillof; casi mil más que los 11.400 de la sumatoria de Massa (8.196) y Grabois (3.204).
Contrariamente a quienes pensaban que Javier Milei se desinflaría, el libertario fue el gran depositario del “voto bronca”: obtuvo 9.265 votos, casi 2 mil más que los 7.478 de su precandidata local Evelyn Cantoni, quien se vio claramente beneficiada por el arrastre. Tanto es así que en algunas urnas de Santa Rosa, por ejemplo, logró más votos que Juntos por el Cambio o equiparó a Marisa Fassi.
Patricia Bullrich y Horacio Rodríguez Larreta tuvieron una elección paupérrima: acumularon apenas 9.048 votos frente a los 9.225 de Grindetti y Santilli en Provincia; y los 9.597 de sus dos precandidatos locales.
En la interna de Juntos se dieron algunos datos extraños. Patricia Bullrich superó a Rodríguez Larreta por 500 votos (4.761 vs. 4.287) pero su precandidato local Carlos Álvarez perdió por la misma diferencia ante el larretista Santiago Mac Goey (4.519 contra 5.078). Hay que recordar que Álvarez competía apalancado por el aparato mayoritario de la UCR y que Mac Goey contó con el solitario apoyo de Carolina Torrilla a partir del acuerdo provincial de Santilli con Gustavo Posse.
¿Cómo se explica esta inversión de resultados y esta débil performance de Álvarez en tándem con el radicalismo? Posiblemente algunos votantes del sector de Mac Goey cortaron boleta apoyando a Bullrich a nivel nacional porque la veían más competitiva o que otros espacios hicieron un trabajo hormiga repartiendo boletas cortadas para incidir en la interna opositora. Como sea el caso, el resultado fue un mazazo en los búnkers amarillos. “Nos mató Milei” resumió un dirigente cuando se abrían las primeras urnas.
El voto en blanco también fue significativo. En la categoría presidencial se registraron 1.772 y en la distrital casi el doble: 3.241, prueba de que muchísimos votantes de Cañuelas no se sintieron representados por ninguna opción local.
Escrito por: Redacción InfoCañuelas
